Pasaron algunos días, Laura no podía dejar de pensar en ese beso. Amaba con locura a Martin, de eso no tenía duda, Pero ahora mismo no sabía que era lo mejor para ella y Lucas. Tenía a las represalias de los Logan quienes a las claras querían firmar lazos más que comerciales con Martin y ahora debía velar por la seguridad de su hijo. Estaba muy confundida. Había pensado incluso en irse lejos para poner distancia entre ambos. Pero la situación de su madre no le permita hacerlo.

Una tarde, Laura estaba en su casa cuando el sonido del teléfono rompió el silencio. Era Leticia, y su voz temblorosa la llenó de preocupación.

—Laura, necesito que vengas rápido. La situación se ha salido de control—dijo Leticia, con un tono teñido de ansiedad.

— ¿De que hablas , Leti? Me asustas. ¿Dime qué sucedió?” preguntó ansiosa.

—Estoy con frederick y llegó Martin y… ven por favor antes de que se maten— dijo con ansiedad. Sin perder tiempo, Laura se vistió y salió corriendo hacia el lugar donde sabí