La alarma sonó a las tres y media de la madrugada, la apague lo más rápido que pude ya que no quería que nadie se despertara. Cambie el pañal del bebe y volví a ponerlo en su cuna. Cuando termine de cambiarme salí del departamento y las chicas estaban esperándome afuera para irnos juntas.
El resto de la mañana y parte de la tarde se paso tranquila, agitada pero tranquila. Las tres parejas que vinieron a hacer sus encargues para sus bodas también pidieron todo para el viernes. Así que nos pasamos el resto de la tarde preparando, rellenando los bizcochuelos, para mañana poder decorarlas, mañana también debíamos hacer todos los postres que nos habían pedido para acompañar las tortas.
Mañana si seria un día más agitado. Drake y Arian aún no podían creer la cantidad de gente que venia todos los días a comprar.
-Con razón mi padre me dijo que tener una buena panadería no era cosa fácil, ¿No te dan ganas de cerrar e ir a casa a dormir?- me pregunto Drake apoyado en el mostrador-
-Todo el t