Al ver que Jimmy se ponía un poco nervioso, Charlie sonrió y le aseguró: “Por favor, no tienes de qué preocuparte. Nadie te va a hacer nada, pero si te sientes amenazado, puedes llamar a la policía. Por cierto, la línea de emergencias oskiana es el 110”.
Jimmy se sintió un poco aliviado al ver que Charlie realmente no intentaba incomodarlo y se ajustó el cuello de la camisa cuando dijo: “En realidad, no pretendía causar problemas… me alegra que Matilda haya encontrado el amor verdadero una vez más, y si podemos ser amigos, puedo dejar de lado mi reclamo y quedarme hasta el final de la boda, ofreciéndoles a los recién casados nuestros mejores deseos como representante de mi familia”.
Aun así, su expresión reflejaba desprecio al volverse hacia Yolden. “Además, tengo mucha curiosidad y estoy deseando ver qué contactos podría tener el Profesor Hart que, según tú, podrían ser mejores que los de Bill”.
“Pronto lo verás”. Charlie sonrió y asintió.
Jimmy permaneció escéptico y se burló: