Valentina permaneció sentada en el sofá durante mucho tiempo. Finalmente se levantó y se dirigió al hospital.
Necesitaba pensar sobre el bebé, pero ahora debía acudir a la cita con Luciana.
Media hora después, Valentina llegó a la habitación VIP de Luciana.
Luciana sonrió: —Valentina, has venido. Y bastante rápido.
Valentina observó el rostro pálido de Luciana: —Tu corazón está empeorando. Si te desmayas otra vez, probablemente correrás peligro de muerte. Así que, puedo venir a verte mientras pueda.
Luciana finalmente entendió por qué su corazón empeoraba: seguramente era por el estrés que le causaba Valentina.
Luciana controló sus emociones: —Valentina, no te preocupes por eso. Mateo ya ha encontrado un corazón compatible conmigo. Mateo me salvará.
Valentina arqueó las cejas: —¿De qué sirve encontrarlo? ¿Esa persona está de acuerdo en salvarte? Si no lo está, sería ilegal.
Luciana se quedó sin palabras.
En ese momento, Catalina intervino: —Esa persona definitivamente estará de acuerdo