CAPÍTULO 188. La entrega y la ventaja.
Capítulo 188
La entrega y la ventaja.
La voz de Carlos sonó clara al otro lado de la línea. Julián la escuchó con el teléfono en altavoz, aún tratando de mantener la calma mientras veía a Teresa temblar a su lado. Carlos había sido preciso: exigía que Teresa ingresara a su red de atención, controlada por él, con su gente y sus condiciones. Eso era lo que quería desde el principio, el control total.
—Bien —dijo Julián al otro lado—. ¿Cuál es la condición exactamente?
La respuesta no tardó. Carlos, con su tono frío de siempre, explicó que el ingreso debía ser completo. Internación en una de sus clínicas, seguimiento constante, y un equipo médico designado por él. No bastaba con un paquete de ampollas dejadas al azar. Querían responsabilidad médica, protocolos, registros digitales y, sobre todo, que el tratamiento se hiciera en su espacio, con su equipo.
Eso le daba poder y, al mismo tiempo, la posibilidad de presentar a Teresa como ejemplo.
Julián lo quiso discutir, decir que no permiti