Capítulo 93
|| Punto de vista de DANTE ||
El trayecto hasta la finca de mi abuelo me pareció un lento descenso al infierno.
Apreté el volante con tanta fuerza que se me pusieron blancos los nudillos y me dolía la mandíbula de tanto apretar los dientes. La furia que bullía en mi pecho era diferente a todo lo que había sentido antes. No era solo ira. Era traición.
La traición del único hombre que una vez creí intocable.
Mi madre estaba muerta. Envenenada en una cama de hospital, indefensa y desarmada. Y el responsable de ello, el hombre que lo ordenó, era el mismo que me había criado.
Mi abuelo.
Aparqué fuera de la gran finca, sin apenas fijarme en los guardias apostados en la entrada. Me reconocieron al instante, pero dudaron antes de abrir las puertas de hierro. Lo sabían. Sabían para qué había venido.
No esperé a que me acompañaran. Empujé las puertas y mis botas resonaron contra el suelo de mármol. El aroma de los puros y el whisky añejo llenaba el aire, un aroma que antes me result