Capítulo 59

Una media hora después ya estábamos preparadas, agregamos a nuestro look unos monos de cuero elástico negro. Eso nos mantendría discretas en la noche oscura, y nadie vería como nos acercábamos de lejos. Melody consiguió la ubicación exacta del sitio donde se habían encontrado para recuperar a la pequeña.

Estábamos listas.

El miedo se filtró entre mis venas congelándome, ya no había nada que hacer. Podía morir, pero no iba a dejar a Priscilla y a Don solos.

La esposa de mi amante, espera, ¿dije mi amante? Estoy muy mal de la cabeza, en serio. En fin. Melody estacionó su motocicleta a un lado de la carretera. Casi grito porque ella cogió una curva en la que pudimos habernos matado. Estaba descubriendo muchas cosas de una integrante de la familia que más odiaba.

Continue lendo este livro gratuitamente
Digitalize o código para baixar o App
Explore e leia boas novelas gratuitamente
Acesso gratuito a um vasto número de boas novelas no aplicativo BueNovela. Baixe os livros que você gosta e leia em qualquer lugar e a qualquer hora.
Leia livros gratuitamente no aplicativo
Digitalize o código para ler no App