Me despido de Enzo por última vez antes de entrar a la casa. Mientras entraba, recuerdo que le dije que le iba a preguntar a mamá sobre los sueños que había tenido y si significaban algo. Le preguntaré después de que termine de contarme sus noticias.
—Mamá, estoy en casa—digo tan pronto como entro.
—Estoy en la cocina—dice ella.
—Hola, mamá, ¿cómo estuvo tu día?—