Solté una risa estrangulada y nerviosa.
-No juegues así conmigo Evan, tengo los nervios destrozados.Traté de acercarme de nuevo, pero en su rostro se mostraba fría distancia y dureza. Me quedé clavada en mi lugar.-¿Evan?. - pregunté indecisa.-¿Porqué me hablas con tanta familiaridad?. - su voz sonaba plana, como si no tuviese ningún sentimiento.-Evan. - mi garganta amenazó con cerrarse. - soy tu novia, y también tu prometida...Arrugó el ceño, era la primera expresión que veía en su rostro desde que ingresé al dormitorio.-Tú no eres mi prometida. - dijo indiferente. - Mi prometida es..Un doctor entró al lugar y mostró sorpresa ante mi presencia. Antes de que pueda decir nada lo agarré de la muñeca y lo llevé fuera mientras la puerta se cerraba sola.-Doctor. - d