Mientras seguíamos caminando mi yo interior no se explicaba como podía recordar el camino para llegar a ese jardín, cuando llegamos una O se formó en voca ya que ese lugar si estaba y lo único que hice fue colgarme del brazo de mi amigo indicándole que si estaba, el volteo a verme con cara molesta diciéndome-porque te emocionas si aquí no hay nada solo árboles y más pasto, el lugar que me dices que soñaste NO ESTA- al escuchar estas palabras me asombre porque yo si podía verlo y el no a lo mejor tenia algún hechizo mágico y no lo percate así que utilice mi energía mágica y seguía sin notar algo extraño, al notar la cara seria de Leo no le mencione que yo si podía verlo para no entrar en más detalles ya que ni yo me explicaba ese hecho, así que lo tome nuevamente del brazo y le dije vamo nos solo fue un sueño nada fue real.

Leo asintió y nos fuimos de ese lugar, de vez en cuando yo volteaba ya que no entendía el hecho de que mis ojos si lo veían y los de el no, cuando salimos del bosque nos volvimos a encontrar en la escuela percatandonos que no estábamos solos que el Alfa y sus amigos también estaban ahí junto con sus dos compañeras Lía y Camila en ese momento pude ver que a mi amigo Leo se le iluminó su rostro visualizar a Camila ya que ella también lo vio y se dibujo una sonrisa en su rostro, al ver esto me sentí mal por mi mejor amigo y solo lo solté de brazo apurando mi brazo y ella no pensara que el y yo teniamos algo que ver.

Al percatarse Leo de eso aceleró su paso y coloco su mano en mi hombro indicándome con un apretón que lo esperara, sin voltear a ver al grupo seguimos nuestro camino hacia nuestras casas, cuando salimos del bosque empezaba a anochecer, el camino fue completamente tranquilo y en cilencio, antes de llegar a nuestro destino miré al cielo viendo como la luna empezaba a colocarse en su lugar en el cielo y si pensarlo más voltee a ver a mi amigo y le pedí que -Fuera feliz y que buscara a Camilia porque pude percatar que a ella también le gustaba y que yo no me interpondria en su camino y que no tenía que esperarme hasta que encontrara a alguien con quien estar, así que tenía que buscarla e invitarla a salir- al finalizar mis palabras el me dijo -no porque tu y yo hicimos una promesa de que seriamos felices al mismo tiempo y que el esperaría a mi lado hasta encontrar esa persona- yo lo mire con cariño porque sabía que era un gran amigo pero no sería una piedra en su camino para ser feliz.

A lo respondió -Por mi no te preocupes mi momento aun no ha llegado y me sentiría muy culpable si tu no eres feliz, así que lo mire y le dije si quieres mi felicidad busca la tuya primero y si no lo haces pronunciare palabras mágicas para que te olvides de mi y seamos unos completos extraños- al escuchar estas palabras el puso una cara de molesto pero sabia que lo cumpliria aunque mi corazón se partiera un poco así que lo único que hizo fue asentir y tomar mis manos -sabes que siempre seremos amigos y aunque Camila y yo seamos pareja yo seguiré a tu lado y podrás buscarme en cualquier momento-.

Los dos nos miramos y como siempre hacíamos al cerrar una de nuestras promesas unimos nuestros dedos meñique y nos dimos una gran sonrisa y nos abrazamos, al llegar a casa le indique -A partir de mañana tenía que buscar su felicidad y que no se preocupara por mi, yo estaré bien- el me dio una gran sonrisa y camino a su casa despidiéndose con una mano.

Yo entre a mi casa cene con mi madre y mi hermana y al finalizar cada una se alistó para tener un buen descanso sin antes darnos una muestra de amor y un beso de buenas noche. Al estar en mi cuarto lo único que pude pensar fue en volver a ver a ese hermoso lobo en mis sueños.

•Leo•

Mer es una chica que merece ser feliz y encontrar una pareja que la ame tal cual es, sus palabras me dejaron completamente impactado por romper la promesa que hicimos de niños, pero de lo que si estoy seguro es de que ella haría lo que fuera por alejarse de mi para que me anime a estar con Camila, pero ahora que hicimos una nueva promesa voy a conquistar a la chica que me gusta y no me alejará de mi amiga nunca, esos fueron mis últimos pensamientos antes de cerrar mis ojos.

Al día siguiente me prepare para ir a la escuela, me puse un pantalón de mezclilla, una playera manga corta donde se viera un poco marcado mi cuerpo y mis tennis, al bajar a desayunar mi madre me miró con mucha alegría- Ya que era momento de que cambiaras tu vestimenta- era raro que me vistiera así ya que solo lo hacía en casa y ella siempre me pedía que demostrará mi cuerpo tan trabajado que tenia porque traería locas a las chicas lo cual nunca me importo, pero a partir de este día sería diferente mi vestimenta. - - Yo solo estoy cambiando mis playeras no tienes que exageran mamá porque sigo siendo el mismo- la abrace y ella solo me dio una enorme sonrisa y me felicito junto con mi padre.

Al finalizar el desayuno salí de mi casa y me dirigí a la escuela un poco nervioso porque por más que pensara en que decirle a Camila no se me venía nada a la cabeza y en lo único que pensé es que tenia que llegar casual para no asustarla y así fue, el destino estaba s mi favor ya que la encontré en el salón sola leyendo un libro y por la Diosa que era hermosa, sin dejar de mirarla me acerque a ella y las salude -Hola Camila buenos días- ella no levantó los ojos de su lectura y me respondió -Buenos días- algo que me preocupa pero cuando no dije nada más ella me miró y puso cara de asombro y mencionó - ¿Eres Leo?, no lo puedo creer, ¿Por qué ese cambio de look?, te queda muy bien - al hacer esas preguntas solo se dibujo una sonrisa en mis labios por qué ella si me conocía.

Ella me miró y solo le pude decir -Es un pequeño cambio de look en las playeras ya que no era tanto de playeras tan pegadas y gracias por el cumplido, pero quería saber ¿Si quisieras ir a comer conmigo un postre en la cafetería de la sra.Perea conmigo?- ella me sonrió -Con mucho gusto voy contigo, desde hace tiempo quería que me hicieras esa invitación- algo que me sorprendió un poco por que Mer tenia razón si le interesaba a Camila.

Desde ese momento nos sentamos juntos y platicábamos en los descansos de las clases de todo un poco hasta que vi a Mer y la salude, pero lo que me entristeció más es que ella ne ignorará ya que ese no fue nuestro trato, al ver la reacción de Mer Camila me miró y me dijo -¿Por qué reacciona así, acaso era tu novia y terminaron su relación?- algo que hizo que estallará de risa lo cual a Camila sorprendió y le dije -Por supuesto que no somos novios ella es mi hermana, mi confidente y mi mejor amiga, de hecho ella fue quien me animo a invitarte a salir ya que asegura que de alguna forma yo te gusto- al decir esas palabras ella se puso roja y eso confirmó lo que Mer me dijo, al querer escapar de mi ella se dio media vuelta para alejarse, pero no se lo permite por qué la tome del brazo y me acerque a su oído y le dije -Por que a mi si me gustas Camila y es algo que ya no deseo ocultar, es por eso que quisiera saber si te gustaría ¿salir conmigo?.

Su respiración se volvió un poco alterada, me asuste un poco y la solté al momento de hacerlo ella se giro para verme a los ojos y su respuesta fue -Claro que acepto salir contigo Leo, desde hace tiempo quería que me miraras para que supieras que a mi también me gustas mucho- sin más la abrace y le di un pequeño beso en la frente.