Narrador
Alfred descendió de su coche mientras Elizabeth observaba desde la ventana. No podía negar que la asustaba su reacción ante lo sucedido.
Tomó aire, mientras aún pegada a la ventana vé como Alfred abre la puerta trasera de uno de los coches y una hermosa mujer, muy elegante baja con su ayuda.
Ese episodio le ocasionó un fuerte dolor de cabeza.
“Yo preocupada por toda la manada y tu detrás de otra mujer", dijo mientras apretaba sus puños con mucha rabia.
No pudo sentarse a esperar una audiencia con él, antes se detuvo para observar su aspecto frente al espejo acomodó mejor su ropa y el moño que llevaba en la cabeza.
“¿Quién es esa mujer se preguntó?", mientras caminaba a toda velocidad, pero una mano la detuvo.
-Señorita Elizabeth, usted tiene prohibido el ingreso.
-¡¡HAZTE A UN LADO, ZACK!!, dijo en un tono amenazante.
-No me obligue a utilizar la fuerza, ¡por favor!
-No te atrevas a tocarme, sal de mi camino si no quieres problemas, hablo con tanta firmeza que Zack solo asi