Lizandro quería poder volar hasta el sitio en dónde le dijeron se encontraba el coche donde Valentina salió de la mansión Masherano, no podía pensar en más nada que no fuera en encontrarla a salvó

Apenas llegaron el Alfa bajó corriendo, se acercó al auto donde pudo aspirar el aroma de su luna, este estaba mezclado con sangre, en el accidente ella había resultado herida eso era un hecho

El lobo buscó huellas para saber hacia donde habían ido y buscar en esa dirección, pero lo único que encontró fue las huellas de unos pies con garras, comenzaban en un punto y seguían hasta el coche, después simplemente desaparecían

Many y Paolo buscaron por todas partes otra explicación pero no encontraban nada, ni las llantas de algún coche que se hubiese estacionado cerca, ni huellas de alguien que se hubiese dirigido a la carretera

— No puede ser, ¿qué demonios es esto? ¿dónde está Valentina? ¡no hay huellas de ella o de alguien más, esto... no tengo explicación! — el Alfa se pasaba las manos por e