ASHTON
Como predije, el pendejo de Marc se dio cuenta de mi ubicación detrás de la ventana y no tardaría en abusar de Madison, tal y como lo prometió. No sé en qué momento lo hará, pero me encuentro casi seguro de que tendrá que drogarla para lograr su cometido.
En cuanto salieron de la habitación, llamé a Taylor para pedirle que los siguiera sin que Marc se diera cuenta, obviamente. Le pedí que no le quitara el ojo de encima, yo estaría en otro punto, observando a Madison, y ante cualquier signo de ataque en su contra, poder interferir. Taylor me dijo que estaría detrás de Marc el resto de la noche y desde ese momento nos separamos, aunque estaríamos comunicados por medio del móvil.
Observé a lo lejos a Madison, quien al parecer se encontraba tomando algo que Marc le había traído y recibí una llamada de Taylor.
—En la bebida, le puso algo en la bebida, ¡haz algo! —sonaba histérica y la verdad es que su actitud no me ayudó para nada.
¡Mierda! Colgué sin decirle nada, no sabía ni qué h