El Hades por fin se deshizo del molesto ruso que le habia causado tantos problemas, ahh... si no fuera por qué dió su palabra de no matarlo, a estas horas ya lo estarían velando
Entonces el esposo, buscando con la mirada a su mujer, la encontró en los brazos de uno de los gemelos Castrioli, su mirada se oscureció
— ¿Otra vez tú, Nathaniel Castrioli? el Hades lo miraba mal
— Ella se desmayó, ¿qué quieres que haga? ¿quieres que la dejé golpearse en el piso?
— Hmmm... llevemosla adentro, todo esto ha sido demasiado para ella, ese imbécil estuvo a punto de llevársela
Te vamos a dar espacio para que estés con tu familia, nosotros regresaremos a los Estados Unidos por nuestros hijos, el peligro ha pasado y nuestros padres ya deben estar superados
Mientras tanto en la mansión Castrioli, los dos primos hacían de las suyas, se le había ocurrido jugar a qué conducían y los coches de edición limitada de su abuelo, fueron ideales
Nathanael, se encontraba en el despacho, el Boss revisaba unos d