C67 - CACHORRO LISTO.

Rowan bajó a Aidan con cuidado, todavía procesando lo que había dicho, y lo miró con seriedad.

—Dime, pequeño lobo —su voz sonó firme pero grave, con un matiz de ansiedad que él mismo detestó—. ¿Tu mamá estuvo casada?

Aidan abrió la boca, dispuesto a responder, cuando una sirvienta apareció y lo llamó.

—¡Aidan, es hora de tu baño. ¡Tu mamá dijo que no te tardes!

El niño frunció los labios, se giró hacia Rowan y alzó los hombros.

—Tengo que irme… si no me baño, mamá se va a enojar —dijo, antes de correr hacia la mujer.

—Espera… —murmuró Rowan, alargando un paso. Pero Aidan ya estaba lejos.

Rowan apretó la mandíbula, con la vista clavada en el vacío. Ahora necesitaba saber más, porque al parecer Anya era una caja llena de secretos.

Muy lejos de ahí, el cuerpo de Levi se estremecía mientras alcanzaba el clímax sobre la piel de una mujer. Cayó a un lado de ella, jadeante, con el sudor pegado a su frente, y ella, satisfecha pero indiferente, se levantó desnuda y camin