C43-¿SABES DÓNDE SE ESCONDE TU HERMANA?
Rowan aterrizó en Zúrich con tres de sus mejores rastreadores. Sin descanso, sin pausa, sin espacio para pensar. Tomaron un vehículo directo a los Alpes suizos, donde se alzaba el territorio de la manada Shadowfang.
Desde la carretera, era imposible ignorarlo: un castillo moderno tallado en la montaña, ventanales de cristal negro, torres de piedra y puentes metálicos. Lujo, poder y amenaza en una sola estructura.
Los lujos no lo impresionaron. Él venía por su hermana.
Cuando el vehículo se detuvo frente a las enormes puertas, una decena de lobos salió a recibirlos. Altos, vestidos de negro, casi todos con ojos violeta, el sello de los Shadowfang.
El primero se adelantó.
—¿Asunto?
—Reunión con el alfa Shadowfang. Ahora —respondió Rowan sin rodeos.
El beta se tensó, pero asintió y desapareció para informar. Rowan esperó de pie, mandíbula apretada, sin saber qué encontraría, pero seguro de que no se iría sin respuestas.
Minutos después, las puertas