C101-CAMBIO DE PLANES.

Rowan la miraba con una intensidad que casi dolía. Sus ojos, ahora claros y llenos de vida, se movían lentamente por el rostro de Anya, como si quisiera grabar cada detalle en su memoria. Había algo desesperado y a la vez sereno en su mirada.

—Mi luz... —murmuró con voz ronca.

Intentó levantar la mano, pero el esfuerzo fue demasiado para su cuerpo agotado. Y Anya, sin dudarlo, entendió lo que él quería. Su corazón se encogió al verlo así, tan vulnerable, pero también se llenó de una calidez que no había sentido en mucho tiempo. Tomó su mano con delicadeza y la llevó a su mejilla, apretándola contra su piel como si quisiera transmitirle toda la fuerza que le quedaba.

—Descansa —le susurró—. Ya estoy aquí, me quedaré contigo.

Rowan asintió levemente y sus párpados, pesados, se cerraron lentamente. Pero esta vez no era el colapso de la desesperación ni el abandono de la lucha. Era un sueño profundo, reparador, como si su cuerpo y su alma entendieran que por fin podí