El café había quedado prácticamente intacto, el tiempo se había extendido más de lo que ambos habían imaginado, pero aún había una pregunta más flotando en el aire, en las dudas, algo que a Ángel lo había atormentado durante todo este tiempo, algo que no tenía a quién más preguntar, pero que ahora, en este ambiente de sinceridad con Paola, sentía que era el momento adecuado para aclararlo.
No era fácil formularla, pero el peso de no hacerlo era aún mayor. Era como una espina clavada en la conciencia, algo que necesitaba salir para cerrar un ciclo largamente postergado y con la mirada fija en su taza, Ángel respiró hondo y se atrevió a hacer la pregunta que llevaba meses guardada en su mente.—Paola, tengo que preguntarte algo más... —dijo con un tono bajo, pero lleno de ansiedad—. ¿Coromoto... cómo está? ¿Habrá quedado embarazada nuevamente de William? Ese… ese siempre ha sido mi mayor miedo.Paola lo miró por un instante, sorprendida por la pregunta, per