- No se añadirán nuevas cláusulas a este acuerdo, Olivia. - Se lo dejé claro, ansioso por ver la expresión de decepción en su rostro.
- Me divorciaré. - Se enfrentó a mí sin miedo, como si fuera una persona cualquiera.
- Haz esto y destruiré a tu familia. Te quitaré la casa, los muebles y me aseguraré de que nadie en Noriah del Norte te dé un techo.
- Nos vamos a otro país.
- Los seguiré al infierno.
- ¿No tienes nada mejor que hacer que intentar joder a mi familia?
- ¡Yo lo hago! Pero follarme a Ernest Abertton es mi pasatiempo favorito. - No contuve una sonrisa de satisfacción, sin notar ningún tipo de sentimiento o emoción en sus ojos.
- ¿Cuándo termina el contrato? - miró al abogado.
Abrió la boca, pero le contesté inmediatamente, sin darle oportunidad de hablar:
- ¡El contrato es de por vida, Chuchu! ¡Termina cuando uno de los dos muere! - Saboreé aquellas palabras como si fueran la mejor comida del mundo, la que prepara un chef de fama internacional.
- Esto no es muy justo, ya q