Fui a la puerta a esperar a mi hermana. En cuanto salió del coche, vino hacia mí como un rayo, con los ojos mostrando toda su ira.
- Adelante. - dije en cuanto se acercó, pero lo que recibí fue una bofetada.
Me toqué la cara, que parecía arder por la fuerza que había ejercido sobre ella.
- No voy a entrar en esta casa... Nunca. Pero he venido a decirte una cosa: ¡aléjate de mi marido y de mi familia!
Jorel apareció junto a mí en la puerta, dirigiendo hábilmente la silla de ruedas:
- ¿Qué ha pasado? - quería saber.
- Este hijo de puta le rompió la nariz a Rowan. - Ella explicó.
- ¡Joder! ¿Por qué lo hiciste, Gabe?
Me reí sin poder apartar la mano de la cara. Luego miré a mi hermana y le pregunté:
- ¿Por qué lo hice, Ane? ¿Cuál fue su explicación?
- ¡Eres un loco, Gabe! ¡Un ser despreciable!
- ¿Por qué le rompí la nariz a tu marido después de que dijera que se follaría a mi mujer porque era una zorra? ¡Joder, Rowan lo hizo delante de nosotros, mientras se despedía de ella! ¿Y quieres sa