Carmen
—Fabrizio... ¿Qué sucedió? —pregunté, despertándome de repente y viendo al vampiro sentado a mi lado en la cama. Tenía una herida en su cuello, pero se había cambiado de ropa y lucía ahora uno de sus trajes siempre impecables.
—Tienes que ser más específica, Luna… han pasado demasiadas cosas