52. SIN LOBO... ERES UN IDIOTA
LORIEN
Estaba aterrada, volando en las alturas sobre esa criatura del Bosque Oscuro.
El viento silbaba en mi cabello, nos perdíamos entre las nubes. Me aferraba a la cintura de la hechicera, casi a punto de estrangularla.
“Relájate, no te vas a caer, ya estamos cerca de la guarida” volvió a repetirme en la mente.
Cuando la sombra de una mujer apareció en medio de la habitación donde me encerraron, casi doy un grito de susto.
Me explicó que se habían infiltrado en la manada con ayuda de mi compañero y que me llevaban hacia mi hijo.
Dudé, llena de desconfianza, pero no tenía muchas opciones, así que salimos al pasillo, donde las dos doncellas habían sido noqueadas.
Corrimos con prisa, subiendo a una torre elevada en la punta de la montaña.
Los túneles vacíos, todos pendientes de las peleas. Se escuchaba el furor en la lejana arena.
—¡Espera! ¡No me puedo ir sin Gregory! ¡Ayúdenlo, por favor! —le supliqué, aferrándome a su brazo.
Siempre había tenido recelo de los habitantes del Bosque O