Capítulo 49
Lilian ya iba en un taxi camino al despacho del abogado. Se arregló el cabello largo con cuidado, intentando dar buena impresión. De vez en cuando miraba el reloj en su muñeca. La cita con el señor Aditya debía ser a las diez de la mañana, pero esa misma mañana la oficina de abogados le informó de un imprevisto: el encuentro se posponía hasta las dos de la tarde. La decepción se le acumulaba en el pecho, pero respiró hondo e intentó calmarse.Abrió una y otra vez el teléfono móvil, revisando los documentos impresos: el acta de matrimonio, pruebas de que había gestionado trámites para Gabriel, fotografías, informes médicos, recibos del hospital y mensajes que había guardado. Son cosas pequeñas, pensaba, pero quizás sirvan de apoyo en el juicio.A las dos y cinco de la tarde, Lilian llegó a la oficina “Aditya & Asociados”. La sala de reuniones con aire acondicionado le devolvió un poco de calma. Fue recibida por una secretaria amab