EL HOMBRE DE MIS PESADILLAS
- Entonces, hacía mucho que no las tenías y desde que empezaste a trabajar en el colegio reaparecieron – Hizo anotaciones en su cuaderno.
- Sí, sé que puede deberse al estrés, al comer pesado de noche, o tomar alcohol quizás. Pero no me siento tan estresada, ceno muy poco y tomo sólo cerveza los fines de semana.- Bien, y esos días que soñaste cosas raras ¿Recordás que hiciste antes de dormir? – Escuché la pregunta y lo único que recordaba es que había estado con Mark. No tenía lógica haber pasado tan lindos momentos y luego tener esas pesadillas.- Sí, fueron días dentro de todo normales y estuve con Marcos.- Bueno. Vamos a dejar todo por hoy, y como pendiente para la próxima sesión quiero que pienses qué cosas te inquietan y crees que pueden repercutir mientras dormís. – Quedé pensativa mientras la observaba unos segundos. Creo que me seguía hablando, pero ya no podía prestarle atención, hasta que volví a reaccionar.- Bien, perfec