19. Sospechas...
Capítulo 19. Sospechas en la piel
El amanecer se colaba tímido entre las cortinas de la habitación, dejando franjas de luz sobre las sábanas arrugadas. Emiliano había abierto los ojos mucho antes de que el sol se elevara. Dormir era un lujo que no podía darse, no después de la noche anterior.
Sentía el calor del cuerpo de Mariana pegado al suyo, su respiración acompasada y tranquila, como si nada hubiese pasado. Como si no lo hubiera arrastrado a esa tortura en la que ambos se quedaron a medio camino, agotados, jadeando, sin llegar nunca a consumar lo que los devoraba.
La tenia recostada parcialmente sobre su pecho, una de sus piernas cruzaba sobre su abdomen, mientras que la otra estaba entrelazada con la suya. El brazo de ella descansaba sobre su pecho desnudo.
Cualquier exportador externo pensaría que son una pareja amorosa en su luna de miel, vaya juego del destino. Pero él sabía muy bien que no había nada normal ni amoroso en esa escena.
Su mandíbula se contrajo.
-- Maldita seas