Capítulo 68. El Día Antes del Voto Final
Melisa encendió su celular. Dudo por un segundo en hacer la llamada, pero al final decidió que sería mejor escribir, y así lo hizo:
** Gracias por lo de hoy. Bastián está muy feliz **
No hubo respuesta inmediata. Pero unos minutos después, apareció la notificación.
** Más le vale. Ese niño ya es un Novak **
Melisa cerró los ojos. No supo si reír o llorar.
El matrimonio sería en unos días. La cuenta regresiva había comenzado.
Y aunque aún no se amaban… ya compartían lo más importante: un hijo, un apellido, y un destino que ninguno eligió… pero que ahora era imposible de evitar.
Unos días después.
La mansión Novak resplandecía bajo el suave sol de la mañana. Los jardineros trabajaban desde el amanecer, podando rosales, decorando las pérgolas con cintas blancas, y dejando impecable cada rincón del enorme terreno para la recepción que se celebraría después de la ceremonia religiosa. Era la boda de Melisa y Sebastian, pero el ambiente en la casa Novak estaba cargado con una tensión especial