El viaje en helicóptero es muy largo, tan largo que me duermo y solo cuando aterrizamos es que me despierto, después de ser llamada por mi esposo, para bajar del helicóptero. Ya que, todos parecen estar entretenidos en asegurar el lugar ante un posible ataque.
— Despierta, Dove. Hemos llegado a nuestra nueva casa — dice Danell y yo lentamente miro a todos lados. — Tienes los ojos abiertos, pero, pareces aun dormida.— Lo siento, solo estoy desorientada. — susurro aturdida.— Debes reaccionar. Si pudiera, te llevaría en mis piernas, pero, el terreno no es apropiado para un descanso agradable en mis piernas. Así que, levántate, por favor. Tenemos muchas cosas por hacer. — dice Danell y yo asiento recibiendo la ayuda de Felipe para bajar del helicóptero sin caerme, porque estoy aun somnolienta y todo está muy oscuro.— ¿Dónde estamos? — pregunt