Claus le quita el seguro al arma y me ve serio.
– ¿estás hablando en serio? – pregunto en tono burlón
– ¿sabes? Estas herido – comienza en ese tono aniñado que suele usar con sus víctimas – tendido en una puta cama de hospital y por lo que soy consciente el único con una maldita arma y un cuchillo en la habitación soy yo – comenta muy seguro de sí mismo
– Claus hace unos minutos estabas llorando como una niña preocupado porque algo podría pasarme ¿y ahora dices que vas a dispararme? Eso no te lo crees ni tú mismo – comento poniéndome en pie con dificultad, el respira profundamente
– Dark estoy hablando en serio – elevo mi rostro para verlo y sonrió retándolo
– adelante Claus dispárame, justo aquí – susurro apuntando con mi dedo índice la parte sup