Aquel dia en la mañana Charlie y Julian habían tenido una discusión.
-No.- fue su respuesta
-Solo seria entrar y salir. Lo he hecho miles de veces. No puedes prohibirme la entrada a mi propio mundo, el lugar al otro lado del muro es mi hogar.
-No iras al mundo de lo oculto – fue contundente – no es seguro en estos momentos. Ni para ti, ni para nadie. Seria una real tontearía.
-Solo comprare unas cuentas cosas en el mercado- trato de explicar el chico
-¿Cosas como la poción de ayer? ¿crees que me he olvidado de aquel incidente?
El muchacho se cruza de brazos – ¿Qué? ¿me vas a castigar?
-¿crees que mereces un castigo?
Charlie sabia, que muy probablemente lo merecía.
-No- mintió - además los del consejo no se portaron muy bien conmigo y mis hermanos cuando estuvimos hospedados en el palacio de la orden sagrada de los ancestros
-Un nombre ridículamente largo.- aporto Julian -¿eso que tiene que ver con querer ir al mercado?
-Solo comprare algo
-No.-dijo firmemente.
Julian sabia que esa