Cuando Charlie llego a su casa con la tan ansiada poción, el primero en recibirlo fue su hermano menor. Este tenia apenas 10 años.
-¡Charlie! ¡Tenemos hambre! ¿Dónde has estado?- el muchacho se agacho para recibirlo y lo abrazo. Charlie apenas tenia 15 años, pero era bastante alto para su edad.
-Tuve que salir a comprar la medicina de mama
-¡Mama se pondrá bien!- ni siquiera era una pregunta, pero la felicidad en el rostro del niño era notoria, cuando su rostro se ilumino al instante
-¿Acaso lo dudabas?- le sonrió de vuelta, -ve a decirle a Oliver que se vista. Saldremos a comer algo rico.
-¿Lo que yo quiera?- pregunto aun mas emocionado, como si eso fuera siquiera posible
-Lo que tú quieras, pequeño glotón.
-No soy glotón… soy un niño en pleno desarrollo.
-Y uno muy listo- dijo cuando le deposito un leve beso en su frente- ahora, ve.- y así lo vio desaparecer hacia una de las habitaciones
Charlie se dirigió hacia la pequeña cocina que tenían, y empezó a separar la medicina en pequeñ