—¡Rugido!
El Qi del dragón generó una poderosa corriente de varios impactos, que lanzó a Silvio varios metros hacia atrás. Al mismo tiempo, la figura de Silvio en estado de invisibilidad apareció a menos de cinco metros de Simón, siendo igualmente arrojada por la corriente, cayendo al instante al suelo.
—Jejeje... Han pasado más de treinta años, y nunca me he enfrentado a un oponente como tú. Esta vez, te mostraré lo que soy capaz de hacer.
Con esas palabras, los dos personajes de Silvio comenzaron a recitar un hechizo al instante, y luego, ambos abrieron los ojos con una fuerte intensidad, pronunciando al mismo tiempo: —¡Escudo del Vajra!
En ese preciso instante, una luz dorada apareció alrededor de sus cuerpos, formando un escudo protector. Simón sintió que algo fuera de lo común estaba sucediendo. La energía que emitía este escudo era algo que nunca había experimentado antes.
Simón recordó la sensación que tuvo cuando apareció la Torre de los Encantamientos de Xenón, lo que indicaba