Capítulo 22

Kalil.

Paso un trago forzado llenándome de paciencia.

—Mi amor…

—Kalil… —ella refuta de nuevo y quitando mis manos de su rostro—. No sabes nada de mí, ni yo misma sé. En este último tiempo he estado sola, y el rey de Yomal me ha tendido la mano de una forma que jamás podría agradecer.

Me despego de su tacto rápidamente, mientras la ira comienza a circular por mis venas. Me quema y me duelen mucho sus palabras.

—No sigas… —le pido áspero.

Ella asiente espaciando más nuestra distancia.

—Yo jamás podría hacer una cosa de estas —ella quiere explicarme su situación desconociendo lo que pasa en ella, odiándose por tener este tipo de sentimientos por una persona que piensa, no conoce—. Yo no podría vivir de esa manera.

Paso mis manos por e

Leia este capítulo gratuitamente no aplicativo >

Capítulos relacionados

Último capítulo