64.
El día de la boda llegó. Mariel se levantó temprano, nerviosa, y se dio un baño. Se vistió con ropa suelta para acudir al médico y obtener los resultados que confirmarían su embarazo. Quería estar completamente segura antes de compartir la noticia.
Cuando llegó al consultorio, el médico confirmó sus sospechas. Su felicidad era inmensa; no podía esperar a contarle a Karim.
Volvió al castillo dispuesta a vestirse con su traje de novia. Pero antes de subir a sus habitaciones, un guardia la detuvo.
—Mi señora, el Rey ha solicitado verla en el salón.
La escoltó hasta el salón, donde encontró a Karim sentado en su trono. Él parecía molesto. El guardia abrió las puertas y luego las cerró, dejándolos a solas. La sala estaba decorada con flores, todo preparado para recibir a la nueva Reina.
Ella caminó hacia él, sonriendo.
—Hola, cariño. ¿Qué pasa?
—No te acerques más —le ordenó Karim, alzando la mano. Respiró hondo, evidentemente furioso—. Me ha llegado una noticia, y necesito que seas tú quie