Cristofer: — Ven siéntate a mi lado y conversamos —
Andrea: — No quisiera interrumpir —
Cristofer: — Pará nada y quería comentarle que la próxima semana viene un cliente muy importante para mí, es importante que haya una excelente cena —
Andrea: — Comprendo y haré mi mejor esfuerzo —
Tome asiento al lado de él mientras se tomaba el té, me era agradable estar a su lado.
Andrea: — Lo sé y gracias —
Cristofer: — ¿Cómo te hizo sentir ese mensaje? —
Andrea: — La verdad incómoda y mi única petición fue que desapareciera de mi vida —
Cristofer: — Dura petición, no crees —
Andrea: — Es lo mejor para mí, espero en algún momento dejar de amarlo y si lo llegó a ver que este no me duela e incluso lo pueda ver con indiferencia —
Cristofer: — Entiendo y te admiro, en todo lo que hemos conversado no te he visto llorar —
Andrea: — No, ya lo hice y no voy a derramar más lágrimas en alguien que ha destrozado mi corazón, quiero sanar y es la razón de comenzar de cero —
Cristofer: — Sabía decisión —
Despu