—¿Quién es?— pregunta Lena al verla estática
—¡Mamá!— soltó un grito de felicidad Francesco, exaltando el corazón de Lena, la cual automáticamente se puso de pie y contempla al niño entrar y correr hacia ella
Lena siente emoción al verlo, y lo recibe con los brazos abiertos dándole un gran abrazo cálido, al tenerlo cerca, su alma volvió al cuerpo, su corazón se volvió a calmar, pensó que lo había perdido.
—hijo que dicha verte— Lena deje de abrazarlo, para agacharse y ponerse a su altura —me tenías preocupada, tu padre está buscándote, ¿Cómo has llegado cariño? Llamaré a tu padre
—¡No! ¡No lo llames mamá! Si lo hacer me volverá a alejar de tu lado— súplica Francesco haciendo pucheros
—hijo, yo también quiero tenerte a mi lado, pero no está bien que hagas ésto, tu padre está buscándote como un loco, porque te ama y se preocupa por ti
—perdón mamá, no quería hacerte sufrir, y tampoco a papá— él baja su mirada, pero Lena coloca sus delicadas manos en la rostro de Francesco
—no estés t