Narra Ashley.
No pude dormir nada y por más que lo intenté, no logré hacerlo, me costaba dejar de pensar en Aslan, y de preguntarme a mí misma si lo estoy haciendo mal.
No es que quiera hacerme la tonta, pero es que cuesta creer que un hombre que fue mi novio, amigo y prácticamente familia duran