Solo tenía a Sonny como hijo.
Mientras Sonny le llamara papá, aunque no fueran especialmente cercanos, tampoco había distanciamiento entre ellos.
Esto le proporcionaba a Hank cierto consuelo.
Tras terminar la llamada, Sonny le devolvió el celular a Serenity y dijo, —Papá quería que yo volviera y me quedara unos días, pero me negué, mañana vamos a visitar a Grant. No quiero volver, Klay siempre se mete conmigo.
—Pero ya no le tengo miedo, porque sé artes marciales.
Aunque Sonny no mostraba mucho talento natural para las artes marciales, su entrenamiento persistente lo había hecho más fuerte y musculoso. Su entrenador decía que, si seguía así, en una década más o menos sería capaz de defenderse.
Sonny pensaba que alcanzar el nivel de Serenity sería suficiente.
—Si no quieres volver, está bien.
Serenity acarició el cabello a Sonny con cariño y dijo con suavidad, —Es tarde, a la cama ya. Mañana nos vamos.
—De acuerdo, tía. Buenas noches.
Después de darle las buenas noches a Serenity, Sonny