—Pues, no hablemos más de ella. Que tengamos una buena vida.
—Así es, nos basta con vivir nuestras propias vidas. Los malos ya han sido sancionados por la ley y han recibido su merecido. Por cierto, supongo que Dalia irá a ver a Thiago cuando salga de la cárcel, ¿quieres llamarle para avisarle?
Isabela respondió tras un momento de silencio: —Thiago y ella son hermanos verdaderos, es normal que vaya a ver a Thiago. Ya es un adulto, tomará su propia decisión. Siempre he dicho que respeto todas sus elecciones y decisiones.
Serenity se lo pensó un momento antes de decir: —Entonces, déjales en paz.
No todos los hermanos podían tener la relación amistosa que los de la familia York, ni serían tan cariñosas como ella y su hermana.
Dalia e Isabela compartían la misma madre, sus padres eran hermanos, y ambas tenían sangre de la familia Nuñez en las venas, pero las dos se llevaban como si fueran enemigas.
La abuela May y Camelia regresó antes del anochecer, y Remy y Elisa también llegó.
Los primo