Callum bajó las escaleras con Isabela, y se acercó a la pareja para saludarla.
Isabela también.
Los dos se sentaron frente a Zachary y Serenity.
Serenity preguntó preocupada: —Isabela, ¿estás bien?
—Bien, sólo que aún me duele un poco el cuello. Serenity, gracias por salvarme.
Isabela agradeció a Serenity con sinceridad.
Serenity dijo: —Somos familia, no hace falta ser tan cortés. Sin embargo, a partir de ahora, deja que los guardaespaldas te sigan. Será más seguro y nos sentiremos más tranquilos. Hoy me he encontrado por casualidad con esa emergencia y te he salvado, de lo contrario las consecuencias habrían sido horribles.
Isabela también se asustó y comentó: —Callum también me lo ha contado, estoy de acuerdo con que los guardaespaldas me sigan de cerca a partir de ahora.
Si no se hubiera hecho cargo de la empresa, tal vez no tendría que ser seguida por guardaespaldas, pero ahora se había convertido en el único obstáculo a los ojos de sus dos tías. Supuso que el incidente de hoy se t