Polo le dio un vistazo, y esta pregunta había estado en su mente durante mucho tiempo.
Pero lo más extraño para él era que los dos tenían buena enérgía física incluso entre los hombres, y ahora no podían seguir el ritmo de estas dos mujercitas, y estaban casi caídose por cansancio.
Parecía que debería darle un puequeño castigo a ella.
—Oye, ¿de qué te ríes?—Teo se agitó la mano frente a sus ojos.
Polo volvió a él, contuvo su sonrisa y mostró su semblante habitual con frialdad.
—Teo—Polo dijo con voz tranquila, —¿Alguna vez has pensado en volver al camino correcto?
Teo estaba atónito y su expresión se complicó.
—Aunque ahora estás con Lynn, y ella también puede aceptarte, tienes que pensar con claridad. Pasas los días arriesgando la vida. Tienes poder y seguidores, pero también tienes enemigos.
—La última vez que estuve en ese hotel por casualidad... —Polo lo miró significativamente, —Si algo similar vuelve a suceder, ¿habrá tal casualidad?
—Si algo te vuelve a suceder, ¿qué felicidad t