La mujer pelirroja leyó el nombre que aparecía en la pantalla:
Scarlett Evans.
Su corazón dio un pequeño salto. Era Scarlett, la exesposa de Franklin y madre de su hijo. Sin pensarlo demasiado, deslizó el dedo por la pantalla y…
COLGÓ.
El teléfono volvió a sonar poco después.
Tililing~
Emily apretó los labios, molesta, y volvió a colgar.
"¿Por qué lo estoy haciendo?"
Se preguntó, pero no encontró respuesta. Solo sabía que no quería que Scarlett lo contactara. No ahora. No mientras ella estaba ahí.
Cuando el teléfono sonó por tercera vez, Emily intentó agarrarlo nuevamente, pero el aparato resbaló de sus manos…
—¡AAAH! —gritó la mujer pelirroja. Hizo un torpe esfuerzo por atrapar el aparato en el aire, golpeándose el brazo contra el borde del escritorio.
PUM~
—¡¡AY, MALDICIENDO!! —gritó Emily. El impacto hizo que un cajón se deslizara un poco hacia afuera.
Emily dejó el teléfono sobre la mesa y se frotó el brazo, pero algo en el cajón llamó su atención. Había un destell