436. Nuevo romance
Mike
Sonreí como un tonto al final de la ceremonia, mientras los aplausos resonaban en el jardín.
Pierre, mi hermano gemelo, estaba casado. Y no con cualquier loba… con Juliana, esa pequeña tormenta de personalidad fuerte que creció conmigo como una hermanita molesta. Y Jason, el lobo más terco que he conocido, estaba completamente derretido por Kiara, que siempre fue mitad sol y mitad huracán.
¿La verdad? Yo estaba feliz por ellos.
Muy feliz.
Pero también… con esa pizca de envidia sana. Esa que te da cuando ves a alguien encontrar exactamente lo que necesita, alguien que ve cada parte de ti y aun así elige quedarse. Yo también quería eso. Aunque viviera diciendo que no.
"¿Babeando, Mike?", oí que alguien bromeaba, y puse los ojos en blanco con una risa débil, mientras seguía el flujo de invitados que regresaban a la mansión.
El salón estaba simplemente… hermoso.
Luces colgantes en hilos delicados descendían del techo alto como estrellas atrapadas en cúpulas. Las mesas con arreglos fl