Laila Carter
Miré él retrato que estaba colgado en la pared.
Sonrei.
— Mami!! Mamii! — Me giré y sonreí al ver a Salomón correr hacia junto a Andre ambos tenían una cara que me decía que había problemas — Andre no quiere prestarme el auto, mamá dijiste que era para los dos — Dijo Salomón tan rápido que apenas logre entender lo que decía.
Me incliné, Salomón fue el primero en llegar a mi sus ojitos estaban cristalizados, Andre llego con sus ojitos tristes y el carrito de juguete en la mano.
— No deben de pelearse — Comencé a decir
— Es que el quiere jugar solo con mi carrito y yo quiero que juguemos los dos mama — Dijo Andre explicándome la situación.
Mi pequeño Andre era un niño muy maduro y le encantaba estar con su hermano, Salomón también era muy maduro pero muchas veces solo quería ser hijo único, quería tener su propio espacio.
— Mi amor es cierto lo que tu hermano dice?— Le pregunté, el asintió con la cabeza mientras me miraba, limpia sus mejillas quitando así las lágrimas que