C193-¿IRA, MIEDO... DESEO?
C193-¿IRA, MIEDO... DESEO?
Su presencia llenó la habitación.
Era alto, casi dos metros, piel dorada, cabello castaño, corto a los lados y algo más largo arriba, desordenado. Sus brazos tatuados parecían contar historias que nadie se atrevía a preguntar. Y su rostro… jodidamente perfecto.
No era justo.
Pero sus ojos, oh dios, eran dorados y extraños y la examinaron sin pestañear. Con la expresión de alguien que no sentía nada.
Ashley tragó saliva y sintió un tirón en el estómago, tenso, molesto, como si su cuerpo reaccionara por cuenta propia.
Drakos caminó hacia ella, despacio, y de la nada su mirada bajó. Ella llevaba un camisón blanco, casi transparente bajo la luz. Sus pezones, duros por el frío, se marcaban contra la tela, haciendo que se detuviera un segundo. Las pupilas se le cerraron, como las de un reptil.
Y Ashley lo notó.
—¿Qué es esto? —soltó ella, levantando la barbilla con furia—. ¿El gran rey dragón necesita secuestrar mujeres para sentirse poderoso?
Drakos no respondi