_ Si lo pones así, entonces en cuanto se compruebe que no está embarazada o de a luz quiero su cabeza, ya que no puedo tener la tuya._ le dijo Luca mirándolo con odio.
_ Luca, por favor, no es mejor dejar las cosas como están? _le dijo Quiteria en tono conciliador.
_No, que clase de segundo al mando seria si no soy capaz de darle un escarmiento a quien me falta el respeto._ le dijo furioso.
_ Pida alguna otra cosa o me veré obligado a presionar a Elisa para…
_ No pierdas tu tiempo, Matteo, el secreto que sabe Elisa de Quiteria no debe saberse, ni siquiera tú debes revelarlo si aprecias tener la cabeza sobre los hombros. _le advirtió Ugo.
_Tú mismo dijiste que no lo defenderías ni lo protegerías y yo tengo el derecho de proteger a mi hermana _le dijo Matteo.
_ Ya es hora de que ella se asuma las consecuencias de sus actos, pero te aseguro que Luca pedirá otra compensación. Dada la delicada situación en la que se encuentra, no está en posición de exigir demasiado._ le dijo Ugo.
Unos 20