C72- ARTES OSCURAS.

Siguieron adelante. El pasillo descendía, húmedo, con el eco de sus pasos y el olor a pólvora. Al girar la última esquina, lo vieron. Viktor estaba ahí, con un arma en la mano, respirando agitado. La linterna titilaba sobre su rostro, marcado por el miedo y el cansancio.

—¡Esto no tiene que ver contigo, Grayson! ¡Déjame ir! —gritó, apuntando hacia ellos.

Grayson avanzó lentamente, con los ojos fijos en él.

—Te equivocas. Tocaste a mi hermana y eso lo hizo personal.

Angelo se movió cautelosamente hacia la izquierda, rodeándolo.

—El juego se acabó, amigo. Bajas el arma y vives. O...

El silencio fue un segundo tenso, cargado de respiraciones cortas y miradas firmes. Luego, Viktor apretó el gatillo.

El disparo resonó en el túnel, pero Grayson esquivó por pura inercia y Angelo respondió con fuego inmediato. El lugar se volvió un infierno de balas. Viktor retrocedió, disparando sin control, mientras una bala le rozaba el hombro.

—¡Cúbrelo! —gritó Grayson, lanzándose haci