Capítulo 200
La habitación ya estaba ordenada y limpia.

Sin embargo, debido a que nadie había vivido allí por mucho tiempo, carecía de presencia humana y había un ligero olor a humedad flotando en el aire. Lucía abrió todas las ventanas para ventilar y sacó las sábanas del armario.

—Si estás cansado, puedes recostarte aquí un rato —sugirió.

Mateo estaba sentado en el sofá con los ojos cerrados y desprendía un fuerte olor a alcohol. Lucía notó que apenas hablaba, lo que indicaba que estaba agotado, así que se esmeró en arreglar todo para que pudiera descansar en la cama.

Mateo se frotó la frente y asintió: —Entendido.

Lucía no dijo nada más y bajó a la cocina. Como la casa carecía de productos básicos y probablemente no habría nada para aliviar la resaca, decidió salir un momento.

En ese instante, Adriana estaba observando desde lejos y vio a Lucía marcharse. Sabía que Mateo estaba arriba, que había bebido bastante con familiares y amigos, y que seguramente estaría borracho. Era la oportunidad perfe
Continue lendo este livro gratuitamente
Digitalize o código para baixar o App

Capítulos relacionados

Último capítulo

Explore e leia boas novelas gratuitamente
Acesso gratuito a um vasto número de boas novelas no aplicativo BueNovela. Baixe os livros que você gosta e leia em qualquer lugar e a qualquer hora.
Leia livros gratuitamente no aplicativo
Digitalize o código para ler no App