Cap. 99
—Baja la voz, Lena. — Suplicó. Lo último que tenía en mente era liarse con el guapo doctor, sobre todo si él se convertía en su superior.
—Vale, vale, no hay necesidad de que te pongas así. — Respondió ella. — Ahora que lo recuerdo, ¿no es el juicio de Edmond hoy?
Violette palideció. Había olvidado por completo el problema legal entre Edmond y Danzou. No solo porque el pelinegro ya no lo mencionaba, sino que su vida era un desastre, estaba tan absorta en diversos asuntos que tal tema pasó a más allá de un segundo plano, apenas y tenía cabeza para asistir al trabajo.
—Sí, dentro de algunas horas. — Confirmó. Echó una mirada discreta al reloj de pulsera. Sintió alivio al darse cuenta que disponía de tiempo suficiente para arribar al juzgado a la hora perfecta.
Ambas abandonaron la sala de juntas con rumbo a la salida del ala este del hospital. Mientras se desplazaban por los largos pasillos, Violette escuchaba atenta los últimos acontecimientos en la vida marital de su mejor amiga, la c