— ¿Hablar? ¿De que podríamos hablar padre? — lo miré sin emoción y puse mis manos en mis bolsillos — ¿De el hecho que jamás estuviste enfermo? O ¿De todo el daño que le provocaste a mi madre con tu supuesto accidente? ¿Ah?
— Se que estas enojado y tienes razón en tus quejas, pero hay muchas cosas que no sabes Vernon y que es mejor que no las conozcas — bufe ante sus palabras, más cínico no podía ser.
— ¿Por qué no? ¿Tienes idea del jodido desastre que se está ocasionando solo por eso? — Me acerque a el sin dejar de mirarlo con frialdad. — ¿Por qué lo hiciste?
— Carl déjanos solos — le ordeno al enfermero este asintió y salió de la habitación — también tu asistente.
— El se queda, habla de una vez. No tengo nada q