LANY
Observo el cuerpo casi desnudo de mi hermano al meterse al agua y mojo mis bragas, unas que le robé a Ariel, nada como un experto de un extremo a otro, meto una uva a mi boca y anhelo sus manos recorrer mi cuerpo. Su boca mis labios, y su pene adentrándose a mi interior.
—¿De verdad no quieres nadar? —me pregunta saliendo del agua.
—No, me gusta verte, como cuando éramos niños ¿recuerdas?
Asiente.
—Como quieras.
—Yo sí acepto la invitación.
La noche se me rompe cuando la voz